Encontrarme con este libro fue un toque de magia. Sucedió cuando estaba navegando los oscuros torrentes de una profunda crisis personal, vislumbrando apenas el rumbo, apelando a lo que estuviera al alcance para propiciar que mi estrella iluminara mis pasos.
Prólogo al libro de Juan Carlos Gambarotta: “De mochilero a GUARDAPARQUE”
